Una memoria de Chaos Chara (6)

Este relato sale directamente de un roleplay hecho con Bruno trovatelli 19.

¿Te conozco?

Underfell. Un universo donde "matar o morir" es la regla.

Esta línea temporal en concreto no parece ir por un buen camino. La intrusa en este mundo tampoco parece contenta.

Otra vez, el azar la llevó a verlo a Él, en la oscuridad al otro lado de una puerta que no debería estar. Miraba fijamente, sin poder moverse ni pensar con claridad.

Pero Chaos Chara no era la única visitante del multiverso ahora mismo.

Un esqueleto que brillaba como un día soleado en la superficie, paseaba por el lugar mientras hablaba para sí mismo.

— Ah... de nuevo, otra vez... Un mundo acabado, tanta alegría desapareció delante de mí.
¡Cómo detesto esto! Es como si me arrancaran una parte de mí.
En lo más profundo, destructores, y creadores, ¿acaso el hecho de tener piezas faltantes... hacen que el juego sea más enfermizo?

Entre el polvo y la soledad, una ráfaga de emociones explosivas llama su atención. A la lejanía, logra sentir la presencia de alguien.

— Hm, vaya, ¿un humano? — Concentrándose en los sentimientos que emanaban de ese ser. — Siento alegría, retorcida, sí, pero es alegría... qué raro, por lo general, Night se encargaría de esto... Pero meh, el que duerme se lo pierde, jaja.

Se transforma en polvo dorado, dirigiéndose a ese lugar recóndito donde se encuentra esa persona.

Misma que ahora se está tirando el pelo por la rabia de lo que acababa de ocurrirle. Una vez más.

— ¡¿OTRA MALDITA VEZ?! ¡¡ARGH!! ¡¿Por qué?! ¡¿Quién carajos es Él?!

— Doctor W. D. Gaster, es un científico con un propósito noble, pero un destino cruel, ¿no crees eso, Chaos? — Una dulce voz aparece detrás suyo, sorprendiéndola.

Chaos reacciona con un brinco, volteando a verlo. Otro Sans del montón, aparentemente, pero este se veía más brillante que otros.

— ... ¿Te conozco?

— Oh, no. Pero yo te conozco muy bien, tu alma pasó por algo en ese lugar, ¿no?
¿Matarlos a todos te hizo sentir bien?
Bueno, por tu cara supongo que no sabes a qué me refiero, jaja.

Cara inexpresiva.

— Más despacio, Doradito, ¿de qué hablas? ¿cómo me conoces? ¿eres otro de esos observadores?

La sonrisa en el rostro de este sujeto no se desvanece.

— Doradito, heh, me gusta.
Y sí, conozco tu alma. Es una pena, usualmente, te ayudaría con tu problema, pero desafortunadamente, no puedes morir...
Tenemos eso en común. — Le enseña su alma a la humana mágica, una luz en forma de manzana dorada.

— Oh... se ve dulce — Ella dibujaría una sonrisa estúpida en su rostro.

— Y nop, no soy un guardián. No soy como ellos.

Saca su lengua de forma burlona mientras mira hacia un lado, de una forma infantil, para luego posar como un superhéroe.

— ¡Soy DREAM SANS! Y me encargo de ponerle un alto a gente como tú. — ¿Por qué parecía que había luz a su alrededor?

Chaos no parece contenta con esas últimas palabras, pasando su mano lentamente por su rostro, con pesadez. No está con ánimos de jugar ahora, después de ese amargo accidente.

— Ah, aquí vamos... ¿de nuevo? — Deteniendo el movimiento en su mano, como si se hubiera pegado a su mejilla. — No, espera, tú eres diferente...
¿En verdad eres un "héroe"?

Tratando de establecer un poco de confianza, Dream se acercaría un poco a Chaos.

— Soy el héroe de las esperanzas, Chaos. Soy la luz que resplandecerá más fuerte que las estrellas.
Ayudo a aquellos que desean un salvador.
Y tú me llamaste.

La humana retrocede unos pasos al oír esas palabras.

— Perdón, ¿KHE? ¡Yo nunca llamé a ningún idiota!
Yo solo estaba aquí dando la vuelta y encontré esa puerta y...

Al dar la vuelta para mirar de nuevo esa habitación llena de oscuridad, solo alcanzaría a maldecir en voz baja. Después de lo cual gira levemente su cabeza, para mirar por el rabillo del ojo a este ser de luz, cuya sonrisa por fin parecía borrarse.

— ¿... dijiste que lo conocías? ¿Al hombre con esas manos huecas?

— WinDings Gaster, el Científico Real.
Sí, lo conozco. Él te hizo algo, ¿no?
No me refiero a este, sino el de donde sea que saliste.

— No tengo ni $%&# idea. Si lo supiera, esto no me daría tanta rabia.

Al girarse de nuevo para ver mejor a este Sans, diferente a otros, este tenía una mano en la barbilla, como analizando la situación, mirando confuso hacia ella.

— Hmm, esto será un poco más difícil.
Además de rabia, ¿hay algo que me sea de ayuda?
Yo podría intentar rastrearlo.

Una mueca de disgusto en su boca fue lo mejor que Chaos pudo hacer para mostrar su confusión.

— ... ¿¿¿Qué quieres???

— ¿Qué no es evidente? Tu felicidad, niña. Hasta tú mereces ser feliz.
O al menos tener justicia, si llego hasta él.

— ¡Ja! Cualquier otro hubiera aparecido para decirme:

Levantaría sus manos cerca de sus mejillas, como fingiendo un berrinche y, con una pobre imitación de una voz de Sans, seguiría.

— "AlTo AhÍ nIñA, eStÁs AlTeRaNdO eL oRdEn De EsTe UnIvErSo Y tE vOy A dErRoTaR"

Dream Sans no podía contener la risa después de eso.

— ¡Eso es muy ridículo! ¿Cómo derrotas a alguien inmortal? ¿En verdad te han dicho eso? — Con una cara que era confusión y risa en partes iguales.

Contagiada por la risa, Chaos apenas lograba asentir con la cabeza como respuesta.

— Una vez, Error había intentado matarme, casi muere de tanta energía positiva. Quedó paralizado por una semana.

— ¿Ah, sí? Cuéntame más — Respondió ella, mientras se acercaba con mucha curiosidad, apenas conteniendo la risa.

Dream se sienta en el piso, invitando a Chaos a hacer lo mismo. Ella se deja caer sentada, sin dejar de fijar su mirada en él.

Empezaron a compartir anécdotas sobre aventuras y encuentros que tuvieron con otros viajeros del multiverso, y no paraban de reír. Si alguien hubiera visto, hubiera pensado que eran amigos. Nada que ver con lo incómoda que era la situación justo antes, mirando a la oscuridad. Ahora todo era feliz, tranquilo. Un momento ciertamente único para Chaos, ella no lo recuerda, pero había tenido momentos similares en otros juegos... juegos que terminaron destruidos tarde o temprano.

Pasaron varios minutos hasta que se calmaran las risas.

— Ah, me caes bien, Doradito.
Para ser "uno de los buenos", has sido muy amable con esta fanática de la destrucción, jaja.

— Tú también me caes bien, Chaos, y hago esto porque intento mejorar. No es mucho, pero lo vale.

Después de una sonrisa leve, Dream se pone de pie, estira los brazos y cambia de tema.

— Ok, hagamos esto.
Yo buscaré a ese científico, y si no lo encuentro, llama mi atención de alguna forma.
¡Aviso que no me contendré!
Dudo que salgas ganando de eso, pero mantente determinada, Chaos. Tú tienes un don, siéntete orgullosa de eso, ¿ok?

Decía esto mientras le daba unas palmaditas en la cabeza. Chaos solo escuchó, dejando que la confusión la consuma.

— ¿... qué? ¿Por qué quieres hacer eso? ¿Qué relevancia tiene? Quieres algo a cambio, ¿no? Nadie es bueno con una destructora como yo porque sí.

— Quiero ser tu amigo, eso es todo, esa es mi relevancia. Además, ya tengo tus emociones, ¿qué más puedo pedir?

Chaos sudaba frío, convencida de que estaba mintiendo. Tal vez sería chantajeada para dejar de jugar o algo. Incluso le acababa de contar que Ink intentó eso una vez, y aún así, él le hablaba de esta manera. No podía confiar.

¿No es un poco triste que esté tan acostumbrada a ser temida y odiada que esto sea inimaginable para ella?

— Me estás escondiendo algo, estoy segura de eso.

Dream entendía por qué Chaos se sentía de esta manera, así que no intentó convencerla. Dejar que ella lo asimile por su cuenta sería lo mejor.

— Está bien, tengo algo para ti.

Procede a lanzarle una hoja de papel, en blanco. Ella lo recibe, de lleno en la cara, para luego tomarla con dos dedos.

— ... ¿Y esto?

— Me gusta anotar cosas, deberías intentarlo.
Si recuerdas algo de ese Gaster, anótamelo en la hoja y lo buscaré.
Soy inmortal, después de todo.

Y sin despedida más que un guiño de su ojo, Dream desapareció en el aire.

Chaos solo se quedó mirando hacia la nada. Luego a su hoja de papel.

— Pero... ni siquiera sé escribir... ni leer...

FIN-

No realmente.

Aunque sea por experimentar, Chaos dejó una mancha en la hoja. Una mancha con la forma de una mano esquelética, con un hueco en la mitad.

— ...

Miraba profundamente ese hueco, tratando de concentrarse en sus pensamientos.

Dream... es extraño. He visto muchas veces esa cara, pero algo en él es... DEMASIADO diferente...
No solo que sea amable, o esas luces que lo rodean.
Sin embargo, no puedo decir qué es...
... incómodo...
... da...
... miedo.

Agita la cabeza de lado a lado.

¡¿Pero qué estoy pensando?! ¡¡Es solo otro idiota del montón...!!

Pero al mirar de nuevo ese garabato en el papel, su mente formó una imagen rara.

¿Por qué? ¿Por qué ese sujeto me provoca eso?

La imagen se iba distorsionando. Todo iba oscureciendo.

Luz... oscuridad... luz... oscuridad...
Dream... Doctor...
Amable...
Incómodo...
¿Por qué...?

Oscuro, más oscuro.

¿Cómo te sientes ahora, Chara?

Todavía más oscuro.

Te he salvado.

Sentía cosquillas en sus extremidades y en la espalda.

Chaos Chara... nos volveremos a ver, eso es seguro.

Y sin embargo, todo esto ocurrió tan rápido que ni siquiera pudo procesar lo que su ALMA acababa de hacer en su mente.

¿Acaso serían recuerdos? No podría saberlo. Cuando quiso darse cuenta, ya no quedaba nada.

Excepto risas.

Muchas risas.

Tenía ganas de jugar nuevamente.

Jaja... JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

Expulsó magia por todas partes, haciendo explotar todo lo que tocara. Todo en el subsuelo temblaba.

Todo se derrumbó. Pedazos de roca caían por todos lados en la enorme caverna. Algunos escombros aplastaron a la enloquecida humana, y su ALMA salió disparada de ahí.

En algún lugar, entre infinitas realidades, el guardián de las emociones positivas sintió esa locura, pero al intentar seguir su rastro, no percibió nada.

Chaos dormía, carente de sueños, pensamientos o emociones. En algún lugar.