Esto ocurre antes de Un plan de juegos y destrucción.
- Universo: Demitale
Demonios. Literalmente, DEMONIOS.
Era todo lo que Chaos Chara podía encontrarse en este universo. Encadenados, violentos, malditos, la gran mayoría de ellos no dudaban en lanzarse a la batalla por el mero hecho de que ella era una humana... o al menos lo aparentaba.
Ella había entrado a este universo por casualidad, pero una parte de ella también estaba ansiosa por poder enfrentarse a más seres con poder divino. O al menos así lo estaba al llegar, porque actualmente está sufriendo de una forma horrible, el daño era tremendo.
Intenta no perder el ritmo en esta batalla contra Undyne, alguien mucho más fuerte que la mayoría como siempre; y contra Sans, mucho más agil y agresivo de lo usual. La batalla ocurre contra los dos a la vez, y Chaos se siente en un absoluto infierno.
- — (¡De todos modos, esto sigue siendo mejor que la paliza de Doradito y su hermano!
Aunque me da curiosidad... que todos estos demonios tengan cadenas en el cuello, ¡es tan extraño!)
Está furiosa, batallando por mantenerse en pie y seguir atacando con todo lo que pudiera crear con su magia, pero el dolor y el agotamiento eran tremendos.
Mientras bloquea una lanza con sus manos, es golpeada por docenas de huesos que la atacaron por la espalda, y no consigue contraatacar antes de que más lanzas atraviesen sus brazos. Se deshace de ellos para poder escapar, y mientras se regeneraba, a un ritmo mucho más lento de lo usual debido al dolor, arroja a sus dos contrincantes algunos picos afilados de magia.
El objetivo ahora es Sans. Salto, patada, retroceder y volver a saltar, pero esta vez su pie fue detenido por la mano esquelética y, reteniéndola en el aire, él le dispara con un blaster extremadamente grande y ruidoso, generando una luz intensa que bloqueó la vista de todos por unos instantes.
Y al recuperar la vista, Chaos se encontró a sí misma completamente atravesada por huesos y lanzas, hasta su ALMA estaba siendo directamente atacada. Lo único que la humana mágica podía hacer ahora era gritar de dolor, tratando de liberarse, en vano.
Su llamado fue escuchado por el que había corrompido este mundo entero, mano derecha de la autoridad, Asgore. Antes de que él aparezca, los dos monstruos de la pelea se marcharon.
- Chara
Al ver esa cara que reconocía tan bien, pero ahora roja y con cuernos, Chaos se sintió frustrada. Y el demonio llegaría, flotando con alegría, acompañada de un par de cuchillos muy grandes y de apariencia antigua flotando alrededor de él.
- — Vaya vaya vaya, ¿qué tenemos aquí? ¡es increíble! Pareces una humana, pero puedo ver en tu poder y tu... ¡ALMA! que eres mucho más que eso, ¿no? ¡Jajajaja~!
- — Ser más de lo que uno parece, ¿eh? Podría decir lo mismo de ti, PERRO CORNUDO
Pese a no poder luchar, no dejaría su actitud violenta en ningún momento.
- — ¡Ay, me ofendiste! JAJAJA
Deja de hacerte la gran cosa, niña, está claro que no puedes enfrentarme.
Sin embargo, tengo que felicitarte, te he estado observando pelear, ¡y te has ganado UN POCO de respeto de mi parte!
- — ¿Entonces TE IMPORTARÍA sacarme de este desastre que dejaron tus mascotas?
- — Claro, claro, será mejor ponernos cómodos para esto...
Con un movimiento de su mano, una de las espadas flotantes de la demonio se lanzaría hacia las lanzas y huesos en los que Chaos se encontraba atrapada, haciéndolas desaparecer en el acto, de paso que le daba un buen corte en el torso a su presa.
- — ¡AGH! ¡HIJO DE-!
- — ¡Ups, se me fue un poco la mano, JAJAJAJA!
Ahora libre, Chaos hubiera querido darle un buen puñetazo a este Chara, pero apenas le quedaban fuerzas para mantenerse en pie, con las piernas temblando.
- — ¿Y ahora qué quieres? — Tratando de mantener una postura defensiva.
- — Dime, criatura, ¿hay algo que desees?
¿Poder, riqueza, amor, venganza?
Puedo darte lo que quieras, ¡mi poder es básicamente ilimitado!
Un largo silencio, en el que la humana mágica mantenía la cabeza baja.
"¿Hay algo que desees?" Qué buena pregunta, maldita sea.
Su única convicción desde que tiene memoria había sido únicamente jugar, divertirse, destruir, sin importar las consecuencias. Pero después de que estas llegaron, aquel castigo de Dream y Nightmare, aquella tregua... aquella amenaza, aquella invitación... No podía decir lo mismo de siempre una vez más.
Hasta el momento había podido mantenerse relativamente tranquila, pese al dolor físico. Pero esa reflexión finalmente la quebró, y no pudo ocultar las lágrimas.
- — Aww, cosita, ¿acaso toqué un punto sensible? ¡Y eso que apenas dije nada, JAJAJAJAJA!
- — VETE AL DEMONIO
- — Ya soy uno, tarada
- — ¡SE ENTIENDE LA IDEA!
...
Quiero... ser más fuerte. Mucho más.
Solo así podré... desafiarlos a ELLOS de nuevo...
Tengo una revancha pendiente con ellos, pero aún no soy lo suficientemente fuerte...
- — ¡Oh, poder, con gusto de lo puedo dar! ¿No ves la oscuridad que cubre a este mundo? ¡Fue gracias a mí!
Lo único que te pediré a cambio es...
¡Tu ALMA, CLARO QUE SÍ~!
¿Qué piensas? ¿No es un precio justo a pagar por un poder que te permitirá vengarte de esos desgraciados que tanto daño te hicieron?
Ambas versiones de Chara se quedarían estáticas, mirándose a los ojos de manera desafiante. La humana, con un rostro ilegible como siempre, aunque seguía derramando unas pocas lágrimas. El demonio sonreía con satisfacción, intuyendo la desesperación de esta potencial esclava.
- — Entonces, ¿aceptas mi oferta? — Entre ambos, aparecería lo que parecía un pergamino con varias líneas de texto, un espacio a firmar, y una pluma.
Un largo silencio. Según el demonio, la victoria estaba garantizada, solo debía darle tiempo a su esclava de aceptar esta oporunidad.
- — Nah
- — ¡¿Eh?! ¿Por qué no? ¡Soy claro con mis términos, confía en mí!
- — Como si YO le fuera a dar a cualquiera ESTO...
De una de sus heridas, aún abiertas, sale una luz, deforme y descontrolada, que resulta ser su ALMA. El demonio se queda observando esta bola de magia, con los ojos brillando de una forma casi lujuriosa.
Lujuria en un sentido de estar apasionadamente interesado en algo, nada que ver con la lujuria íntima.
- — Tanta... magia... brillante... ¡IMPRESIONANTE!
POR FAVOR, QUIERO TENERLO EN MIS MANOS, TE DARÉ LO QUE SEA QUE MI PODER SEA CAPAZ, ¡¡¡SOLO ACEPTA EL TRATO!!!
- — CLAAARO, CLARO, ¡¿Y QUIÉN ESTARÍA SATISFECHO POR GANAR PODER CON ESA TRAMPA TAN SUCIA QUE ES EL TRATO CON EL DIABLO?!
Qué va, ¡YO SOY CHAOS CHARA, Y NADIE EN EL MULTIVERSO PODRÁ RESTRINGIR O TOMAR MI PODER NUNCA!
Así tenga que sufrir para lograrlo, YO MISMA ME GANARÉ ESTA FUERZA QUE NECESITO
Lo que hace unos segundos era un deseo inmenso en la mirada del demonio, pasó al instante a un odio absoluto, perturbador.
- — Entonces te niegas a lo que te he ofrecido... ¡¿Cómo puedes despreciarme a MÍ, CHARA, EL DEMONIO QUE ACUDE CUANDO LLAMAN A SU NOMBRE?!
Pero no creas que esto quedará así...
De inmediato regresaron Sans, Undyne, ahora acompañados de Asgore y por lo menos una docena de temmies, todos con apariencias aterradoras y violentas. Y claro, esas cadenas de colores en sus cuellos no podían faltar.
- — Estás atrapada conmigo ahora, "Chaos Chara", y esa alma tuya será de mi propiedad, en cuanto entiendas que NUNCA igualarás el poder que tengo en este mundo.
¡AJAJAJAJAJAJAJA!
De inmediato, Chaos toma una postura de batalla, viéndose rodeada del peligro. Definitivamente no se ha recuperado ni un poco de la paliza de hace unos minutos, así que solo puede pensar "oh, ya valí ver-".
Y lo hizo. Desde todos lados, todos los enemigos, malditos, no paraban de atacarla. Por cada lado posible recibía golpes de todo tipo de armas, a tal velocidad que no tenía tiempo de contraatacar, bloquear o aunque sea huir, y solo le quedaba gritar de dolor.
- — (DUELE, DUELE COMO EL INFIERNO, ¡BUENO, AL FIN Y AL CABO LO ES! ¿NO? DUELEEE
Sin embargo, no deja de ser extraño... sigue sin ser tan horrible como lo del hermano de Dream... ¿cómo es que un solo pulpo tendría un poder mucho mayor a este ejército de demonios?
¿Es eso de las "EmOcIoNeS" lo que lo hacía tan fuerte? ¿Por ser literalmente un dios?
MALDITA SEA, ESTO ES JODIDO)
Después de pocos minutos de tortura, el demonio líder, Chara, hizo a todos detenerse con un gesto en su mano. Y se alejaron unos pasos, sin dejar de rodear a Chara, quien está en el suelo, completamente destrozada.
- — Y bien, ¿eso te ha convencido de unirte a mí?
- — NI POR UN CARAJO, NUNCA SERÉ ESCLAVA DE NADIE
Ni siquiera esa tregua será capaz de detenerme del todo... solo necesito... tiempo... — Tose un poco de sangre — Ya verás...
Pero todo se quedó en un silencio absoluto de repente. Incluso el mundo parecía haber perdido su color. Chaos miró por encima del hombro del Chara demoníaco, muy al fondo había... un cuervo, mirándola fijamente.
Un cuervo negro cuyas plumas eran totalmente negras, pero sus ojos completamente blancos, emitiendo una luz extraña. Y no paraba de mirarla a ella, como si quisiera decirle algo.
El brillo en sus ojos aumentó. Por un momento, para Chaos, todo fue luz blanca.
Y para cuando quiso darse cuenta, ya no estaba en este mundo.
- Universo: UnderNight
Lo único interesante aquí es el cielo nocturno, estrellado, y la luz de la luna bañando con sus rayos todo lo que hay sobre la superficie de la tierra. A lo lejos se ve un poblado de monstruos.
Chaos aterriza en este lugar, con su cuerpo aún regenerándose lentamente. Por ahora lo único intacto es su cabeza y su rostro, el resto aún está hecho pedazos.
Se sentía... vacía.
Un sentimiento de vacío que inundó todo el mundo, apagándolo todo. O al menos así lo percibiría el guardián de las emociones positivas, que se encontraba ahí por casualidad. De inmediato, él acudió al origen de este sentimiento vacío, no se esperaba que fuera Chaos Chara.
- — Chaos... no esperaba verte aquí.
No hay respuesta.
- — ¿Te pasó algo? ¿Necesitas ayuda?
No hay respuesta.
- — ¿Hay... algo que quieras hablar?
No hay respuesta. Chaos se da la vuelta en el suelo, dándole la espalda a Dream.
Esto resultaba sofocante, lo único que Dream podía sentir en Chaos era vacío, tristeza, frustración, desconfianza... Tuvo que alejarse unos pasos para no hacerse daño con estos sentimientos.
- — Mira, Chaos, sabes que puedes contar conmigo si-
- — No.
- — ... se... supone... que somos amigos... ¿no?
- — ... ¿tú lo crees? — Chaos seguía acostada, negándose a mirarlo. — Después de... todo... ¿aún lo crees?
Un escalofrío recorrió la espalda del esqueleto dorado.
- — (Tú nunca quisiste jugar conmigo. Solo querías limitarme. Tuviste que recurrir a tu hermano... para demostrarme que... nunca fue lo que pensé. Nuestra "amistad"... falló).
- — S-sé que aquello fue bastante malo, pero no me dejaste otra opción... solo quiero lo mejor para ti, y para los demás universos. Tiene que haber un equilibrio, ¿lo entiendes?
No quiero que eso arruine...
- — Ya lo hizo.
Eso dolió... y ahora... te... tengo...
...
- — Miedo.
Eso se sintió como una puñalada para Dream.
Todo lo que intentó todo este tiempo, ayudarla con su problema del doctor, llevarle a lugares que pudiera disfrutar sin amenazar a universos vulnerables, tratar de estar ahí para compartir momentos de felicidad... Y lo mandó todo a la basura por permitirle a su hermano intervenir. No le quedaba otra opción, aún así, fue la peor que pudo tomar.
"Era necesario", "Por el bien de los AUs", ella no es capaz de entenderlo. Una niña, una loca, que solo quiere jugar...
Pero no podía ser de otra forma.
Sin decir nada, Chaos, con su cuerpo casi regenerado, tuvo las fuerzas suficientes para levantarse, aún sin voltear a mirar a Dream, y llevó su dedo a un costado de su cabeza.
- — ¿Sabes qué? No importa.
Y se disparó fuera de este universo.
Lo único que sabía es que las cosas no iban a quedarse así.
No solo con el demonio que trató de tomar su ALMA. Sino con el dios que creía que era su amigo.
3: Un plan de juegos y destrucción ->