Undertale AU´s Wiki

Alma, poder, locura[]

Universo: Mafiatale

Este universo, cargado con el peso del odio y el peligro, recibe en su subsuelo a dos humanos. La mayor, una criatura hecha de magia, con el rostro marcado, el pelo desordenado y ropa a rayas. El más pequeño, un niño lleno de justicia, con sombrero de vaquero, un ojo marcado, y el resto de su cuerpo envuelto en la capa de un rey caído.

Chaos Chara
Clover
Agentes del CAOS y la justicia
— Bien, Vaquerito, este es un mundo... ciertamente peculiar.
Por el momento, aún no puedo empezar mi evento, pero hasta que esté todo listo, ¡este será un lugar perfecto para que sigas repartiendo justicia y haciéndote más fuerte!

Clover no responde, se limita a inspeccionar su alrededor y prestar atención a lo que sus sentidos perciben.

— Es básicamente una guerra por poder. Múltiples bandos se encuentran en conflicto constante, y sus tonterías llegan a joder a monstruos que solo quieren tener una vida tranquila.
Créeme, he visto cosas espantosas aquí-
Eh... ¿Vaquerito?

Para cuando quiso darse cuenta, su pequeño aliado ya se había adelantado a un callejón, donde dos monstruos que parecían de bandos distintos estaban peleando y gritándose entre sí.

Cuando uno de estos dos deja en el suelo al otro, Clover da una pisada fuerte al piso enfrente de ellos, llamando su atención, y apuntando con su pistola hacia el aparente vencedor.

— ALTO AHÍ, COLEGAS, díganme ¿a qué se debe este duelo?

Con la misma furia del conflicto, se ponen a explicar, entre gritos e insultos, que un documento de un bando fue robado por el otro, un documento con importante información sobre alguna cosa que Clover no llegó a entender del todo, pero que involucraba la vida de un niño humano que tuvo la desgracia de caer aquí, un mundo donde su existencia es un crimen.

Teniendo suficiente información, Clover simplemente noqueó a ambos con un golpe en la nuca a cada uno. Justo entonces, Chaos apareció para ver esto último.

— ¿Me perdí de algo?
— Descuida, ellos están bien, solo inconscientes.
Ya tengo práctica para este tipo de cosas.

Guarda su arma y sus brazos debajo de su capa, con una calma total en su rostro.

— Creo que entiendo un poco más lo que está pasando aquí...
Tanto crimen, odio, peligro...
Aún no he llegado a la raíz del asunto, pero me aseguraré de hacerlo y, cuando eso ocurra...

Chaos nota la intensa mirada en el ojo de Clover que no quedó marcado por la locura que le había otorgado. Su iris amarillo emite un brillo que demuestra su convicción.

— Castigaré a todos los que ocasionaron este desastre, ye aseguraré de que todo este mundo reciba su JUSTICIA.
NIVEL 21
Sí. Este niño es capaz de ir incluso más allá del nivel 20. Su fuerte deseo de justicia y la locura en su interior lo hacen sobrepasar los límites que se supone que tenía.

Aunque no se podía ver por su capa, la mano de Clover estaba temblando, con un poco de locura... pero se mantuvo bajo control. Respira lentamente, manteniendo la calma.

— Vaya, puedo notar que tu poder sigue creciendo... Tienes un deseo inquebrantable, Clover.
¡Lo haces muy bien!
Solo... recuerda no perderte a ti mismo.
— ¿Por qué dices eso, Chara?
— ¡Em! Pues, supongo que- — En realidad, se había sorprendido a sí misma al salir eso de su boca, teniendo que acelerar sus pensamientos para llegar a una respuesta.
— "Creo que lo que quería decir era que debes mantener el control de tu poder.
Si llegas a perder el camino, sufrirás mucho más de lo que puedes soportar.
Y creo que te lo digo por experiencia... como alguien que se dejó llevar por su locura, y pagó muy caro por su egoísmo.
— ¡Entendido!

Ambos empezarían a avanzar por las limpias calles de este mundo, percibiendo el rencor y la tensión en el aire, de manera constante. Clover se mantenía atento a toda pista que pudiera llevarle a la raíz de todo este conflicto, sin embargo, Chaos estaba perdida en sus propios pensamientos, saltando de una cosa a otra, sin llegar a ninguna conclusión, hasta que...

— (Vaquerito... pistolas... crimen... justicia... amarillo... dorado... brillo... estrella... ESTRELLITA)
— ¿Pasa algo?
— Acabo de recordar que... ha pasado ya un rato desde la última vez que revisé el mundo de Estrellita.
¡No me malentiendas! Necesito prestar atención a lo que ocurra ahí... algo muy grande está en juego para Estrellita, así que necesito vigilar si algo ocurre... antes de poder invitarla...
Y creo que necesito ir a verla ahora.
Sin embargo, me preocupa dejarte solo aquí, puede ser pel-
— Tú no te preocupes por mí, Chaos.
Puedo hacerme más fuerte, y no tengo miedo.
Ve a lo que necesitas hacer, yo estaré bien.
Además, recuerda que un trozo de ti está en mí, así que no me estás dejando solo del todo, ¿no?
— Buen punto... — Sorprendida por la astucia del chico, las puntas de cabello sobre su cabeza estaban completamente verticales. — Entonces no tengo razones para dudar de ti, Vaquerito.
Te dejo aquí, pero no dudes en que pasaré de vez en cuando a asegurarme de que todo esté en orden...

Ya estaba empezando a abrir una grieta para salir de esta realidad.

— Y lo más importante, te haré saber cuando el EVENTO inicie de manera oficial.

De esta manera, Chaos se despide de Clover, dejando este AU a manos de un justiciero cruel.

El vaquero toca su propio pecho, prestando atención a su respiración.

— Justicia... caos... ja...
¡¿Eh?!

Manifiesta su alma, mostrando que esa magia que Chaos le obsequió brillaba con una fuerza que contrastaba con el sereno brillo de su propia justicia.

¿Era acaso esta una lucha interna sobre su propia voluntad? ¿Estaba volviéndose loco, o solo fuerte? ¿Dónde estaría la diferencia?


Universo: Glitchtale

Lo único que queda en este mundo es un puñado de humanos sobrevivientes, aterrorizados, y su nueva gobernadora, una bestia nacida solo para ocasionar miedo.

Betê Noire
Agente del miedo

Ahora que había cumplido su objetivo de terminar el trabajo de su predecesora, Agate, y satisfizo su deseo de ocasionar miedo en todos, se sentía en paz...

Pero al mismo tiempo, se estaba preguntando si había algo más ahora.

— Claro, está el evento de Chara, pero... ¡ugh, hasta que esa mocosa finalmente regrese! ¡no me quiero morir de aburrimiento!

No tenía idea de que Chaos había pasado a visitarla... y ella, al oír esas palabras, estaba dudando de si acercarse o dejarlo para más tarde, cuando el evento comience en verdad. Finalmente eligió la segunda opción, así tal vez se encuentre con una sorpresa agradable cuando vuelva por la inauguración real.

Betty suspira con pesadez, preguntándose si falta mucho o no, y qué podrá hacer mientras tanto.

Entonces, su compañero/otra mitad vuela alrededor de ella rápidamente, llamando su atención, para luego quedarse en el piso, y cambiar su forma, hasta convertirse en una versión miniatura de la Betty original.

— Aww, vamos, Kumu, no tienes que gastar tu energía en esto-

Kumu procede a manifestar algunas de esas masas extrañas que usa para tomar almas. Las masas chiclosas empiezan a tomar formas irregulares, en un intento de crear humanos y monstruos con apariencias aleatorias.

— ¿Algo... nuevo?

Decide entonces tomar una de las almas de monstruo que tenía en su colección. Mira con atención esa luz blanca: magia pura, serena, propia de la raza ahora extinta. Decide tomar un poco de esa magia e intercambiarla con un poco de la locura que había recibido como regalo de Chaos. Para su sorpresa, la porción de locura se restauró por sí misma.

— Vaya... no exageró al decir que su poder era infinito.
¡En ese caso, será más que entretenido experimentar lo que podré hacer con ello!

Rellenándolo con locura, el alma de monstruo pudo manifestar un nuevo cuerpo mágico. Era un monstruo con apariencia canina, ahora sus ojos eran de una mezcla de morado oscuro y rojo escarlata, dando a entender la magia dentro de este ser.

— Muy bien, perrito, ahora...

La marioneta procede a abalanzarse contra su dueña, sin llegar a hacerle daño, pero evidentemente en un movimiento descontrolado.

— ¡UGH! Tendré que aprender a controlar esta maldita locura si quiero hacer esto funcionar.

Absorbe de nuevo la magia y el alma de monstruo, haciendo desaparecer la manifestación.

Al recibir toda esa locura de vuelta, por un instante siente su alma temblar. Retrocede unos pasos, levemente sorprendida.

— Es inestable, como si en cualquier momento fuera a estallar... Exactamente por esto nunca usé esta magia hasta volver a conocer a Chaos... ¿Cómo me las arreglaré ahora?

Nota que sus dos manos están temblando, y que en su rostro hay una sonrisa que no puede eliminar por alguna razón.

— CLAARO, CLARO, ¡ES TAN EMOCIONANTE! ¡JAJA! Este poder... este JUEGo...
¡¿Qué me pasa?!

Logra apaciguar momentáneamente la locura en el momento en el que Akumu se acuesta sobre su cabeza, con el pelo completamente rosado hasta las raíces. Teniéndose a sí misma... para mantener a raya su poder.

Y decide intentarlo de nuevo, sacando otra alma de monstruo al azar. Esta tenía una apariencia ligeramente distinta, o por lo menos emitía una energía un poco peculiar.

Al manifestar con locura al monstruo que vivía de esta luz, Betty observa con un enorme disgusto el resultado. La forma era exacta, pero reconocer esa cara le generaba pavor.

— El científico ese, ugh...

Y aunque pudo tener bajo control a su marioneta, manteniéndola estática y atenta, algo se sentía incorrecto.

...

Sin decir nada más, Betty le entrega el alma a Kumu, quien de inmediato absorbe toda la magia que le pertenecía, haciéndola desaparecer.

Y vuelve a reír.

Tal vez fue su imaginación jugándole alguna broma extraña, pero por un instante creyó escuchar la voz de Chaos dándole las gracias, y riendo con mucha felicidad.

— Maldición, es como si siguiera conmigo ahora mismo... no debería sorprenderme, un pedazo de ella está en mí.

Acariciando la parte de su rostro cubierta por cabello, sentiría la cicatriz que heredó de su compañera de juegos, al mismo tiempo que observaba la forma inconsistente de su amigo Kumu, quien solo miraba de manera natural.

¿Ella está tomando la locura a su favor? ¿O se está dejando llevar por ella? Difícil es encontrar el punto de equilibrio... pero tiene tiempo para averiguarlo.


En el suelo de esta oficina oscura yacen varios monstruos, inconscientes, y un par de pilas de polvo. Apoyado en un escritorio, el joven justiciero leería con mucha atención algunos archivos. Se encontraba con nariz y boca cubiertos por su pañuelo, así evitaría inhalar por error algo del polvo del lugar... que no era solamente los restos de aquellos criminales que hallaron la muerte.

Con más información en sus manos, Clover decidiría fácilmente su siguiente movimiento.

NIVEL 29
No pregunten qué pasó en medio de todo esto para subir tanto de nivel.

Por un momento tuvo que detenerse para calmar sus emociones. Vio muchas cosas horribles que les pasaban a los inocentes de este lugar, pero se aliviaba sabiendo que había acabado ya con la mitad de los culpables.

Es verdad, tuvo que hacer mucho daño a muchas personas para llegar a esto, pero ¿acaso no se lo merecían? Cuestionarse eso y hallar una respuesta favorecedora se va volviendo cada vez más fácil para el vaquero.

Así que continúa avanzando, decidido, hasta alcanzar a los próximos enemigos.

Durante la batalla, de uno contra un montón, recibe un disparo en su hombro izquierdo, haciéndole escapar una leve queja de dolor. Tomando su pistola con su brazo derecho, continuaría atacando.

— (Venga, esto no es nada, ¡PUEDO SEGUIR!)

Ambos ojos brillarían intensamente, y apuntaría con su alma hacia estos monstruos... aniquilándolos a todos de un solo disparo.

Podía sentir cómo se hacía uno con esa magia que, inicialmente, debía controlar.

Sonríe, satisfecho, de traer justicia a este mundo, acabando con todos los que actuaron por egoísmo en lugar de pensar en el bienestar de la gente que podían proteger.

Intenta usar el fragmento de locura en su alma para tratar la herida en su hombro, y mientras siente la magia hacer el trabajo, casi puede ver a Chaos echándole una mano, felicitándole por su hazaña. Claramente es solo su imaginación.

Aunque también es cierto que, a la lejanía, la única amiga de este vaquero observaba, sintiéndose feliz de ver los logros que este había alcanzado en estos días que fue dejado a solas. Sin embargo, no se acercó a saludarlo... convencida de que el momento ideal para volver sea cuando todo esté listo.

Pese a la ira, pese al dolor, pese a la locura, Clover... se siente en paz.

NIVEL 30

— Vamos... ¡lo tengo!

Una casa quedó en los escombros después de la bola de fuego mágica que había sido arrojada por la marioneta que Betty estaba usando ahora mismo... una manifestación del monstruo que alguna vez fue Toriel.

Su poder estaba visiblemente potenciado gracias a la locura, pero ahora se hallaba completamente bajo control, el juguete perfecto.

Por ahora, su dominio sobre almas de monstruo era perfecto. En cambio, en cuanto a las almas humanas que había tomado...

— Su poder es mucho mayor al de los monstruos... ¡qué pena que nunca aprendieron a usarlo, jajaja!
Ahora, para crearles un cuerpo a estas marionetas... requiere demasiada magia, sería un gasto de energía que no es compensado por los resultados.

Kumu hacía su mejor esfuerzo por crear una forma humana con una de esas masas chiclosas... pero no era suficiente.

— Descuida, eso podemos dejarlo para más adelante, cuando tengamos del todo dominada esta magia...

Al examinar su propia alma, el miedo en ella se había fusionado bastante bien con la locura de Chaos. Aún no está del todo mezclado, pero al cabo de unos pocos días había avanzado mucho en esta simbiosis.

— Más... MÁS, QUIERO MÁS DE ESTE PODER

Dejándose llevar por la emoción, no dudaría en ir a recolectar un poco más de almas, corriendo muy feliz hacia la ciudad.

Detrás de ella, en el espacio que acababa de abandonar, la humana mágica se quedó a observar. Todo parece en orden por aquí, así que puede irse sin preocupaciones por ahora.


Ha pasado otro par de días. Chaos despierta, feliz y calmada, sin darle mucha importancia a dónde aterrizó... hasta darse cuenta de algo.

— Ah, no me jodas, el doctor está aquí... cerca...
¡No podíamos dejar a la protagonista de este CAOS sin su sesión de entrenamiento también!

No podía verlo, y su presencia no era tan fuerte como para paralizarla, pero sí para mantenerla alerta. Con dificultad para moverse, avanzaría tan rápido como podría a lo largo de este subsuelo con una apariencia... peculiar.

Aunque el paisaje estaba lleno de colores, cada monstruo que se encontraba estaba en escala de grises.

Y entonces lo vio... al ángel que gobernaba este subsuelo. En efecto, era Él, Gaster, sentado sobre un trono.

Ahora sí que Chaos estaba sometida por esa presencia.

— (¿El doctor y además con poder divino? ¡Qué inconveniente combinación! Pero algo se siente diferente. ¿Por qué me siento tan calmada a pesar del peligro? No creo que sea él... Soy yo, Es mi determinación. Quiero jugar. Quiero hacerme más fuerte. Igual que Vaquerito y Rosadita. Este es mi momento... DE LUCHAR CONTRA ESTA MALDICIÓN DE UNA VEZ POR TODAS)

Le costó muchísimo, pero su movimiento fue sorprendentemente rápido, especialmente en comparación con todas las veces anteriores que lo había intentado. Levantando su mano en dirección al doctor... ángel, en este caso.

— TE... DESAFÍO... — Incluso su voz salía de su boca, con dificultad, pero no iba a permitir que su maldición la detuviera esta vez.

Después de todo, ¡tenía que prepararse para su evento! ¿Y qué clase de ejemplo daría a sus camaradas si no podía enfrentarse a esto?

Por primera vez de todas en las que había experimetado esto, sonríe, llena de DETERMINACIÓN.

— Qué interesante. Una visitante de otro mundo, ¿que busca desafiarme a MÍ, el ángel salvador de este mundo?
Acepto tu invitación, fascinante criatura...
¡Mis amados seguidores, denle a nuestra invitada la diversión que busca!

Tras esta orden del gobernante del subsuelo, múltiples monstruos grises se lanzarían a atacar a la humana mágica, todos a la vez, con armas que habían sido bendecidas por el mismo ángel.

Esquivar era difícil pues no se podía mover lo suficientemente rápido, bloquear los golpes aún más, casi no le quedaba fuerzas para manifestar algún arma o escudo, de manera que Chaos seguía recibiendo un daño, con las armas benditas, que la hacían sufrir de manera increíble, hasta casi compararlo con la paliza que recibió de Nightmare hace ya bastante tiempo.

— (Heh, el hermano del Doradito... Ahora que lo pienso, si no fuera por esa paliza, probablemente no me hubiera inspirado a hacer esto. JAJAJA, ¡ES TAN GRACIOSO! ¡ME ESTOY HACIENDO MÁS FUERTE, Y LO VOY A DEMOSTRAR! A ustedes dos... Al Doctor... A Betty, a Clover...
Y a Estrellita... SE LOS VOY A MOSTRAR)

Con la meta clara en su mente, la imagen de sus amigos y su plan de diversión, su locura se fortaleció lo suficiente para finalmente manifestar un arma.

Cadenas, largas cadenas con las que atraparía a varios enemigos, no a todos, pero sí a los que estaban más cerca de ella, para luego arrojarlos lejos de ahí.

— (TAN AGOTADOR. TAN DIVERTIDO. TAN AGOTADOR. ¡TAN DIVERTIDO!)

Mientras seguía atacando, bloqueando, a los seguidores del ángel que no paraban de llegar, sentía que su alma estaba haciendo un esfuerzo terrible para mantenerse activa sobre la maldición. Sentía que en cualquier momento se iba a desgarrar y explotar en mil pedazos, pero dado su orgullo, determinación y condena... eso no era una opción en lo absoluto.

Aunque no podía hacer salir muchos sonidos de su boca, en su mente se estaba riendo a carcajadas.

Hasta finalmente derribar al último soldado que llegó... el camino estaba despejado. Paso a paso, se acercaría a Él. Cada movimiento era más difícil que el anterior, pues la presencia era cada vez más fuerte. Pero entonces recordaba todo por lo que estaba luchando ahora, y eso le permitía ser un poco más fuerte.

Y aquí están, frente a frente, la amante de la destrucción, y una variante de aquel doctor que dejó en su alma esta maldición.

— Buen trabajo, criatura. No creas que no me di cuenta, mi sola presencia perturba a esa alma tuya. Aún así, tienes la determinación de sobrepasar lo que te ha dejado de esta manera...
¡Tu victoria es indudable!

Hablaba con absoluta calma mientras veía a la humana hacer un esfuerzo terrible para levantar ambas manos, y dirigirlas al cuello de este ángel.

— Sabes que no podrás hacerlo. Sé tan fuerte como quieras, pero no puedes acabar conmigo.

Aunque Chaos estaba tratando de usar todas sus fuerzas, Gaster solo sentía un muy débil tacto en su cuello.

Permanecen varios segundos exactamente así.

Hasta que Chaos finalmente cede, bajando las manos. Su rostro sigue completamente ensombrecido, pero esboza una enorme sonrisa.

— G... Gra... cias...
— ¿Por qué me agradeces? Eres tú misma la que se está fortaleciendo. Yo solo estoy aquí observando, ¡jujuju!
— ... — Asiente, un poco confundida.
— Eres libre de irte. ¡Ha sido un placer conocer a una criatura tan fascinante como tú!

Un portal fuera de esta realidad tan peculiar se abre, Chaos no duda en moverse hacia allá.


...


Dejando de sentir su presencia, Chaos respira profundamente, como quitándose el peso de encima.


Universo: Dust Prophecy

Y aterriza en esta realidad, fácilmente su favorita para visitar, no muy lejos de la protagonista de cada línea temporal. Después de la enorme cantidad de energía gastada en el juego de hace unos minutos, no le quedan fuerzas para ponerse de pie, pero sí que está en una posición conveniente para ver alejarse a la Chara propia de este universo.

— Oh, Estrellita... ahí va, haciéndose más fuerte...
¡Jajaja~!

Sintiéndose enormemente satisfecha y orgullosa.

De su propia victoria
Del avance que están teniendo sus amigos
De que este juego marche por tan buen camino.
6: Mi Estrellita ->